viernes, 25 de septiembre de 2015

LA CITACIÓN


por Christian

Que lata, ojalá no fuera tan pitonizo. Ya sentí el bajón detestable… ¿seré capaz de desmayarme cuando la sensación sea más fuerte? Ojalá no me hubieran AVISADO con tanta anticipación, este suspenso es peor. Si me dijeran derechamente “lo siento pero estás despedido”…sería mil veces mejor, por lo menos en el momento. ¿y si hago un numerito? Me siento agarrotado.
Lo peor va a ser cuando entre a la oficina del gerente, Ese momento, cuando esté sintiendo los latidos más fuerte que ahora, con dolor en el pecho y la voz se me quiebre…¿estará solo? 
Mis niños…¿cómo le voy a decir a la negra? Ya  la veo llorando y a mí también se me van a caer las lágrimas al verla así…me dan ganas de desaparecer.
La puerta, cerrada para variar. Voy a tocar fuerte y con cara tranquila. ¿cuánto hará que crucé esta maldita puerta por primera vez? Era un sol precioso. Ahora está más oscuro ¿o será que ya me acostumbré y ahora asocio este pasillo con lo gris y la muerte. 
Fingir sonrisa sale peor, con la boca seca y tiesa. Puchas y ahora quiero ir al baño, pero mejor aguanto. Se enojaría si me demoro. Mejor me calmo. Voy a pensar que me llamó para anunciarme un aumento de sueldo. ¿y si es cierto? Va a jubilar, está buscando un sucesor. ¡Jefe máximo sale de la nada, el que nadie espera! La hora, la hora…sí, son casi las tres. 
Capaz que me quiera retar por lo de la fiesta del dieciocho. ¡ojalá sea eso no más! Jefe, estoy apenado, reconozco que cuando el vino está bueno de repente se me pasa la mano… Como que es estas fechas me descontrolo un poco…si mi señora me retó y le prometí portarme bien…voy a celebrar de otra manera de aquí en adelante. Jefe, sé que ya no puedo arreglar lo que hice y no puedo tener más vergüenza. Para qué decir cómo me siento cuando veo que la señorita Carla ya ni me saluda.
Pero mis corazonadas siempre son ciertas. Está en el aire lo de las reducciones de personal…”Don Julio quiere hablar contigo a las tres…” nunca me habían llamado así, con hora exacta…No quiero tocar, esos golpes en la puerta son campanadas de funeral. A lo mejor el jefe tuvo que hacer algo más importante y salió ahora. No siento ruido adentro. ¿por qué a las tres? ¿Será que hay una reunión con gente que viene de afuera y me necesitan para…? Pero dijo “quiere hablar contigo”, eso es conmigo. ¡Me carga no saber a qué vengo! Hace tiempo que varios en la empresa me hablan menos, como que a muchos no les gusto. ¡Pero yo no le hago mal a nadie! ¿Será para felicitarme por algo? ¡Queee! Yo creo que el gerente ni se acuerda que existo. Voy a tocar, voy a entrar con la frente en alto, voy a entrar como un rey, con trompetas y tambores. Siento tanta pena…

No hay comentarios:

Publicar un comentario